FEBRERO 2016

A 100 años de su propuesta, participación política de mujeres sigue sin cumplirse

Foto: Emma Blancas/MujeresNet

La Dra. Rosa María Valles Ruiz destacó la figura de Hermila Galindo, maestra, feminista y política, en la realización de los dos primeros encuentros feministas en México, y quien apoyaba la emancipación de las mujeres a través de la educación y su participación política.

Ciudad de México /MujeresNet.- A un siglo del Primer Congreso Feminista en México, la participación de la mujer en la vida pública -un importante objetivo democrático- continúa pendiente, afirmó la doctora Rosa María Valles Ruiz en su conferencia magistral realizada el 29 de enero de 2016 en el Museo de la Mujer, titulada "El Primer Congreso Feminista. A 100 años de distancia".

Se sumaban el acceso a la educación y las carreras que podían cursar las mujeres, sin embargo, también se preguntaban si "la mujer podía dejar de ser elemento dirigido para pasar a ser dirigente". Y a pesar del debate no se llegó a un consenso y el tema del voto de la mujer no se reflejó en la Constitución de 1917.

De acuerdo con cifras oficiales, de 2007 a 2014 creció de 3.9 a 6.9% la participación de las mujeres a nivel municipal: 169 mujeres en ayuntamientos, sólo siete han sido gobernadoras y el 13.6% de las mujeres está en el gabinete, "el mayor rezago de participación femenina", sostuvo la también profesora e investigadora de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo.

El Primer Encuentro Feminista se realizó del 13 al 16 de enero de 1916 en el Teatro Peón Contreras, donde asistieron más de 600 mujeres, aunque no se sabe con exactitud la procedencia, pese a que se diga que fue nacional, la mayoría, si no es que todas, eran yucatecas, lo que se consideró un hito en la historia del país porque salió en el Diario Oficial, afirmó la doctora en Ciencias Políticas y Sociales.

Como resultado de esta primera reunión de mujeres, se determinó la creación de escuelas de pintura, dibujo, escultura, floristería, decoración, fotografía, platería, imprenta, encuadernación, grabado de acero, además de clases de declamación, en el conservatorio y escuela normal, para reducir la brecha de analfabetismo de la época, sin embargo, no había carreras profesionales, reveló Valles Ruiz.

En el Segundo Encuentro Feminista se continúa el debate sin resultados, pero con el argumento de que era necesario pues las mujeres "debían de defender sus intereses particulares, de sus hijos, intereses de la patria y la humanidad".

La académica destacó la participación de Hermila Galindo, maestra, feminista y política, una figura importante en la realización de este Primer Encuentro y también del segundo. De acuerdo con hallazgos, Galindo fue la que tuvo la iniciativa de organizarlo con ayuda del gobernador de Yucatán, Salvador Alvarado, ya que sostenía que al darles educación se lograría una "desfanatización de la mujer y su mejoramiento social".

Abundó que por su participación en ese Primer Encuentro fue señalada como inmoral: en su ponencia "La mujer y el porvenir" Galindo sostenía que las mujeres debían recibir educación sexual al igual que los hombres para evitar que su instinto sexual tuviera consecuencias como el embarazo; señaló la influencia del clero al vedar el autoconocimiento del cuerpo femenino y decía que "los hombres fundan orfanatorios y casa de cuna como artificioso expediente para eludir sus responsabilidades".

Hermila Galindo propone el Segundo Encuentro para defenderse de los ataques y manifestar la necesaria emancipación de las mujeres porque eran tratadas como animales. A estas demandas se suman las del divorcio, la educación de las hijas e hijos, la prostitución y los exámenes de salud en los hombres para asegurarse que estaban libres de alguna "infección fatal".

Por lo anterior, la doctora Rosa María Valles Ruiz sostuvo que las demandas de aquel entonces siguen vigentes, sobre todo la paridad política que constituye un objetivo democrático que es posible construir desde una perspectiva histórica, social y política.