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Frases Feministas
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El cáncer de mama y la fuerza de las mujeres para luchar por la vida




Foto: Brenda Ayala/MujeresNet

Por María Esther Espinosa Calderón y María del Socorro Martínez Cervantes
Periodista, ha colaborado en diversos medios, entre ellos el Uno más Uno, Mira, El Universal, Etcétera, 'Triple Jornada' del periódico La Jornada, y en la revista Fem. / Estudió la licenciatura en Ciencias de la Comunicación en la FCPyS de la UNAM. Se ha especializado en el cuidado editorial y la difusión cultural, y trabaja como colaboradora independiente para varias casas editoriales.

Ma. Esther Espinosa Calderón y Ma. del Socorro Martínez narran las historias de mujeres de diferente edad y profesión cuya única coincidencia era el cáncer de mama, enfermedad que se está volviendo un serio problema de salud pública por la falta de personal experto, de equipo y cobertura de mastografías; sin embargo, las autoras subrayan la importancia de la autoexploración para salvar la vida.

Cada 24 horas mueren en nuestro país 15 mujeres de cáncer de mama. Se dice que es el cáncer más frecuente en las mujeres y el que causa la mortalidad más alta en la población femenina de 25 años y más en México. El incremento de esta enfermedad es una tendencia mundial. Según la OMS (Organización Mundial de la Salud) cada año se registran en el orbe un millón 300 mil casos nuevos y las cifras van en aumento, por lo que la detección temprana es piedra angular para vencerlo y salvar la vida, no obstante existen otros factores en contra.

Es necesario que las mujeres estén informadas, que conozcan su cuerpo y autoexploren sus senos una vez al mes, porque si bien no se puede prevenir, sí es posible curarlo cuando se detecta en etapas tempranas y los tratamientos son menos agresivos. Octubre se ha institucionalizado como el mes de la sensibilización sobre el cáncer de mama y el 19 es oficialmente el Día Internacional contra el C áncer de Mama.

Esta enfermedad se presenta por lo general a partir de los 40 años de edad, pero cada vez es más frecuente en personas más jóvenes. En opinión del doctor Juan Enrique Bargalló, jefe del Departamento de Tumores Mamarios del Instituto Nacional de Cancerología (Incan) de México, 9% de las mujeres con cáncer de mama que son atendidas en el instituto tiene menos de 35 años, 17% no llega a los 40 años y la mitad del total de casos no rebasa los 50 años. Reconoce que las causas de este incremento y de su manifestación en la población más joven aún no están claramente determinadas en las investigaciones del sector salud aunque se ha demostrado que en países con economías emergentes como el nuestro, este incremento es mayor, pero no descarta que la razón podría atribuirse a que en la actualidad se obtienen cifras más confiables.

Todavía no se conocen los factores que ocasionan la enfermedad, de manera muy general se presume que influyen los estilos de vida no saludables, la alimentación, la falta de ejercicio y factores hereditarios. Es necesario que toda mujer a partir de los 20 años de edad se haga una exploración mensual de sus senos; a los 25 años una visita anual al médico; antes de los 40 un ultrasonido anual y después mastografía y ultrasonido. Si ya han llegado a la menopausia deben elegir un día del mes para realizarse la autoexploración a fin de poder identificar cualquier anomalía.

El cáncer de seno no respeta raza ni condición social. La sola palabra da miedo y se asocia inmediatamente con la muerte, sin embargo la detección a tiempo hace la diferencia entra la vida y la muerte. Los avances científicos y la detección oportuna pueden evitar la extirpación total del seno, además existe la cirugía reconstructiva, prótesis y otras posibilidades para hacer más llevadera la vida de mujeres y hombres que sobreviven a esta enfermedad.

Yolanda vivía en una ciudad de Michoacán, se detectó una bola en un seno, pero no le dio importancia. Más tarde se percató que ésta en lugar de disminuir creció, le quitaron el seno afectado, recibió quimioterapia, pero aun así el mal avanzó y la derrotó. Murió al poco tiempo.

Ignacia se descubrió accidentalmente una protuberancia, el ginecólogo quiso extirparla para mandarla a analizar, su familia se opuso, luego consultaron a un oncólogo quien le quitó el seno y los ganglios que habían sido afectados. Así le ganó la batalla al cáncer y después de 30 años vive para contarlo.

Sus sobrinas Griselda y Brenda le dieron la batalla al cáncer de mama y continúan con sus chequeos en los últimos 4 y 5 años, sus vidas dieron un giro total para tratar de vencer la enfermedad, pasaron por los periodos de angustia, de dolor, de enojo, negación y finalmente de aceptación y reconciliación, pero nunca se dieron por vencidas y continúan luchando y dando seguimiento a sus revisiones periódicas.

Desde hace años vieron la luz fundaciones como Reto, Fucam y Cimab, cuyo fin es orientar y apoyar física y psicológicamente a mujeres con este padecimiento. Algunas como Reto brindan ayuda emocional, pelucas, turbantes y prótesis a quienes lo necesitan. Acuden a hospitales a brindar información sobre cómo cuidarse y a concientizar a las mujeres acerca de la importancia de recibir un diagnóstico temprano. La detección a tiempo puede erradicar el mal y prolongarles la vida.

Las estadísticas de las mujeres que tienen cáncer de mama, de las que murieron por su causa y de las que lograron vencer la enfermedad abarcan todos los niveles educativos, sociales y económicos desde amas de casa, hasta profesionistas y empresarias, ricas y pobres, con hábitos y estilos de vida diversos. Muchas personalidades famosas del espectáculo han decidido hacer pública su experiencia: Angélica María, Alejandra Guzmán, Evangelina Elizondo, Daniela Romo, Patricia Reyes Espíndola, Tania Libertad han dado a conocer sus casos y algunas han apoyado campañas de sensibilización para que la población se informe, se autoexplore y acuda a realizarse periódicamente las mastografías para descartar la presencia de cáncer o detectarlo y tratar a tiempo esta amenaza latente de nuestra época que se ha convertido en un serio problema de salud pública. Mujeres como la estrella de cine Angelina Jolie, han tomado decisiones drásticas de optar por la doble mastectomía preventiva (extirpación de ambos senos) para evitar un posible cáncer mamario por sus antecedentes familiares, pues su abuela, madre y tía murieron debido a ese padecimiento.

Laura, Lilia, Carmelita y Paloma son mujeres de diferentes edades, nivel socioeconómico y educación, no se conocieron, sin embargo, algo las hacía muy parecidas: su fortaleza y valentía para afrontar la adversidad. Desde el momento del diagnóstico, no se vencieron ni un instante. Llevaban al pie de la letra la frase de Eurípides: la vida es lucha y encaraban con optimismo y buena actitud los efectos de las radiaciones, quimioterapias, y los nuevos y no tan nuevos descubrimientos para atacar la enfermedad.

Laura cada día lo vivía tratando de recuperarse, quería estar con sus hijos. Disfrutó la graduación de uno de ellos. Nunca quiso saber su estado de gravedad, pero lo intuía, su cuerpo se lo hacía saber, el dolor lo soportaba en silencio. De repente se desesperaba y se deprimía, pero al instante se animaba.

Casadas y con hijos, estas mujeres querían vivir más tiempo para estar con sus familias. La hija más pequeña de Lilia acababa de cumplir 8 años de edad cuando el cáncer venció a su madre. La mayoría de las mujeres soportan estoicamente sus tratamientos. Con Lilia pasó algo inesperado cuando la habían dado de alta después de cinco años de revisiones médicas sin que el cáncer apareciera, un aneurisma le quita la vida, falleció a los 38 años.

Era una mujer fuerte, alegre, bondadosa y compartida. Recuerdo su rostro dulce diciéndome, "si te duele insiste y busca diferentes opiniones, no te vaya a pasar lo que a mí, pues me dieron un mal diagnóstico y ya ves el cáncer avanzó mientras yo perdí un tiempo precioso confiada de que no tenía nada". Era muy querida con una gran vocación altruista: "Su mano izquierda nunca supo lo que daba la derecha" ni su familia estaba enterada de las obras de caridad que realizaba. ¿Cuántos casos habrá de mujeres que se han hecho la mastografía y por un error técnico o mala interpretación de la misma creen que no tienen cáncer y luego resulta que sí lo tenían? Seguramente no hay estadísticas al respecto, pero todas las personas hemos sabido de casos mal diagnosticados.

Así que el problema no se limita a las revisiones personales y médicas para la detección oportuna del cáncer de mama ni se puede medir por el número de mastografías realizadas en el territorio nacional, pues las autoridades de salud reconocen que la cobertura no rebasa el 15%, no sólo por la falta de equipos de mastografía, sino por la escasez de expertos que sepan interpretarlas para hacer una lectura correcta de las mismas.

A Carmelita a los 33 años le descubrieron el cáncer, logró superar el de la mama derecha, pero a los pocos años la tuvieron que operar del seno izquierdo porque resultó también con cáncer. Cansada de tantos tratamientos, intentó también los alternativos, pero de nada sirvieron. Vivió pocos años después del descubrimiento de su enfermedad y de la extirpación de su otro seno.

Pero la historia de Ana Maria, de Irma, de Lourdes, Ignacia, de Griselda y de Brenda son diferentes, su detección temprana les ha valido su estancia en este mundo. A pesar de las inclemencias de las quimioterapias y las radiaciones, continúan con sus chequeos, dándole la cara a la vida.

El cáncer de mama no es exclusivo de las mujeres, también los hombres son vulnerables a desarrollarlo aunque su incidencia es de menos del 1% según las cifras preliminares de 2013 del INCan. No obstante, un dato relevante es que la familia de ese hombre tiene altas probabilidades de padecer cáncer.

En opinión del doctor Bargalló Rocha "no hay personas con más pasión para luchar que las mujeres con cáncer de mama, en todos los sentidos. Si pudiera comparar por sexo las acciones que hacen las mujeres con cáncer de mama y los hombres con cáncer de próstata, la visión es totalmente diferente. Ellas luchan primero por sobrevivir a la enfermedad, pero una vez que ésta es controlada, trabajan por las demás mujeres que tienen este padecimiento. Y esto no lo ves replicado en el caso de los hombres".






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